El 4 de octubre, día de San Francisco, es también del Día Mundial de los Animales, a los que él amaba y consideraba sus hermanos. Algunas iglesias incluyen en la celebración en honor al Santo, explosiones de pólvora. El ruido afecta a los animales. Los perros ladran mucho o se esconden, sufren de estrés, igualmente los gatos. Las aves se corren. El ruido las estresa y desorienta, les afecta de diferentes maneras, igual que a los humanos. Además, la pólvora contamina el ambiente de diferentes formas.
El Papa Francisco en su encíclica sobre medioambiente dijo: "Hoy advertimos, por ejemplo, el crecimiento desmedido y desordenado de muchas ciudades que se han hecho insalubres para vivir, debido no solamente a la contaminación originada por las emisiones tóxicas, sino también al caos urbano, a los problemas del transporte y a la contaminación visual y acústica"
Me alegré. Pensé que ya no habría pólvora en las celebraciones católicas. Vivo a media cuadra de la iglesia San Francisco. Toda la mañana hubo ruido. El gatito no pudo salir al patio.